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Cualquiera que esté acostumbrado a respirar el aire de un almacén o a recorrer los pasillos de la logística sabe que el movimiento y almacenamiento de palés es una parte constante e indivisible de esta área de trabajo y de su cadena de valor.
Los palés son esenciales para el movimiento de productos por una amplia gama de razones, como la protección de los productos, la facilidad para transportar grandes cantidades, una mejor trazabilidad del inventario e incluso la normalización internacional que facilita el tránsito de mercancías entre países y continentes.
A pesar de sus numerosas ventajas, la manipulación manual de los palés, ya sea en el almacenamiento o en la preparación de pedidos, puede acarrear algunas limitaciones en la operación intralogística.
Debido a su peso y dimensiones, la manipulación y almacenamiento de palés hace obligatorio el uso de carretillas elevadoras o máquinas preparadoras de pedidos. Además del tráfico que pueden ocasionar fácilmente en un momento de gran afluencia, estos vehículos necesitan pasillos amplios y un espacio adecuado para realizar sus operaciones, lo que deja sin utilizar una gran superficie del almacén.
Los sistemas tradicionales de estanterías diseñados para el aprovisionamiento de palés tampoco se acercan a garantizar una densidad de almacenamiento óptima.
Por último, la manipulación manual de palés aumenta el riesgo de errores humanos, como caídas, roturas o registros de existencias inexactos. Además, se trata de un proceso que requiere mucho tiempo y que a menudo implica esfuerzo físico y riesgo de lesiones, especialmente cuando se trata de palés pesados.
En la logística moderna, no hay tiempo que perder ni espacio que ceder.
El panorama actual, que combina la escasez de suelo urbano y el aumento de los precios inmologísticos, las crecientes expectativas de los consumidores y la rapidez de entrega, que ahora se considera una ventaja competitiva, acentúa aún más la importancia de una operativa fluida en la que el tiempo, el espacio y el rendimiento humano deben aproximarse a niveles óptimos de eficiencia.
En este sentido, los Almacenes Automáticos de Palés son sistemas tecnológicos desarrollados para tener la capacidad de introducir/retirar palés sin intervención humana, tanto en estanterías estáticas como dinámicas. Se adaptan a la operativa de cada cliente y varían en función del nivel de automatización implementado, la distribución del almacén, etc.
Por ejemplo, estos almacenes automáticos pueden estar conectados a un sistema de transportadores, lo que permite descargar la palé directamente del camión, pasarla por pórticos de control dimensional e identificación por código de barras, y trasladarla a la zona de almacenamiento donde, ya identificada por el software, será depositada en una ubicación previamente configurada.
Al desplazarse sobre raíles, la anchura mínima entre estanterías es suficiente para que estos sistemas se muevan con rapidez, aprovechando toda la altura del edificio y almacenando a distintas profundidades. Esta combinación de ventajas es crucial para maximizar la densidad de almacenamiento y ahorrar una cantidad significativa de espacio en el suelo.
Estos almacenes automáticos pueden manipular cargas de hasta 1.250 kg por palé, pero están dotados de una gran aceleración y velocidad, lo que permite un acceso rápido y preciso a los productos, una valiosa ayuda a la hora de reducir los tiempos de preparación de pedidos.
La integración con el software de gestión de almacenes permite acceder a las existencias en tiempo real y ayuda a organizar mejor el inventario y a reducir los errores humanos en los procesos de picking.
La necesidad de aumentar la productividad de los procesos intralogísticos se ha disparado en los últimos años, pero no es sólo una preocupación reciente de las empresas.
Hace casi 20 años, VRC WAREHOUSE TECHNOLOGIES instaló un almacén automático de palés de alto rendimiento integrado en la planta de especialidades lácteas de la fábrica de Tocha (Portugal) de LACTOGAL, líder en la industria alimentaria portuguesa. Este almacén automático sigue en funcionamiento hoy en día y absorbe más de 1.000.000 de litros de producto acabado cada día, directamente integrado con las máquinas de llenado TETRA PAK.
Más recientemente, la empresa de Famalicão entregó un almacén automático de palés a INDASA, uno de los líderes mundiales en la producción de abrasivos flexibles de alto rendimiento, con el objetivo principal de almacenar palés de materias primas que posteriormente se utilizarán para la producción.
En ambos casos, VRC fue elegida por la flexibilidad de su ingeniería, que les permitió beneficiarse de instalaciones de alto rendimiento, utilizando menos transelevadores y, por tanto, con un coste de inversión inferior a los convencionales, atendiendo a sus prioridades: el aumento de la capacidad de almacenamiento que proporcionan los almacenes automáticos y, sobre todo, la mayor dinámica de preparación de pedidos conseguida.
A medida que las exigencias de la intralogística siguen evolucionando, la automatización se está convirtiendo en una parte cada vez más integral del éxito de una operación.
Una cosa parece segura para los responsables de las empresas: cuantos menos problemas planteen los procesos de almacén, más tiempo habrá disponible para pensar en lo que realmente importa, las decisiones estratégicas de una empresa.
VRC WAREHOUSE TECHNOLOGIES es una empresa con sede en Vila Nova de Famalicão, Portugal, con 30 años de experiencia dedicados íntegramente al desarrollo de almacenes automatizados. VRC opera actualmente en Portugal, España, Chile y Brasil, centrándose en almacenes automáticos para cajas y palés.
